Conozco los suficientes lugares en la Cordillera Cantábrica como para considerarme un auténtico afortunado. Pero aún así, me quedan por descubrir tantos sitios que dudo que algún día pueda decir que he visitado todos los pueblos, montañas y valles de esta magnifica zona de España. Uno de esos lugares que desconocía hasta este pasado fin de semana y que, sin duda, era uno de los que más ganas tenía de conocer, es el entorno del Macizo de Ubiña, entre la comarca leonesa de Babia y los concejos asturianos de Lena, Teverga y Quirós.
Pese a estar en mi mente desde hace varios años por un motivo u otro todavía no había conseguido planificar una excursión a esta zona, por lo que cuando me enteré que a mediados de Agosto se celebraba un trail por allí ni me lo pensé, me inscribí antes siquiera de mirar el desnivel de la prueba o de si encontraría a alguien que me acompañara en mi correr por esas montañas... finalmente no fue así, pero tampoco me importó, el trail era mi excusa perfecta para adentrarme en un macizo al que le tenía unas ganas enormes, por lo que aunque me tocó ir solo, el 17 de Agosto me presenté en la salida del trail, dispuesto a sufrir y a disfrutar de un entorno que me sorprendió gratamente.
Pese a estar en mi mente desde hace varios años por un motivo u otro todavía no había conseguido planificar una excursión a esta zona, por lo que cuando me enteré que a mediados de Agosto se celebraba un trail por allí ni me lo pensé, me inscribí antes siquiera de mirar el desnivel de la prueba o de si encontraría a alguien que me acompañara en mi correr por esas montañas... finalmente no fue así, pero tampoco me importó, el trail era mi excusa perfecta para adentrarme en un macizo al que le tenía unas ganas enormes, por lo que aunque me tocó ir solo, el 17 de Agosto me presenté en la salida del trail, dispuesto a sufrir y a disfrutar de un entorno que me sorprendió gratamente.