La ruta a través de los cañones del Górgora es una de esas rutas que tenía mirada desde hace tiempo y a la que le tenía muchas ganas. Después de haberla hecho no sólo se ha limitado a colmar mis altas expectativas sobre ella, sino que las ha superado con creces.
Sin ningún genero de dudas es una de las rutas más espectaculares que he hecho en mucho tiempo.
Nosotros la hicimos al revés de como está marcada, saliendo del pueblo en dirección oeste, hacia el Monasterio de San Juan de Montealegre. Los primeros tres kilómetros de ruta son bastante tostones, descendiendo por una pista forestal hasta llegar a la altura del río, pero una vez pasado este primer tramo el resto sorprende por su espectacularidad y belleza.
Lo malo de hacer el camino al revés es que el acceso al cañón es más complicado por esta parte, ya que por lo general se trepa mejor hacia arriba que hacia abajo, aún así exceptuando a personas con vértigo, el acceso es asequible al estar perfectamente equipado con escalas y cuerdas
Una vez abajo, quedamos maravillados ante el desfiladero que ha ido formando el río con el paso de los años, así como también agradecidos ante el frescor que allí sentíamos, en contraposición al intenso calor que hacía en el exterior.
Bajando por esta parte salimos directamente al "Pozo de la Górgora", donde según cuentan las leyendas de la zona el héroe Perseo arrojó la cabeza del monstruo Medusa (parte de esta leyenda la narro al final de este relato).
Desde el Pozo de la Górgora remontamos el río a través del cañón, al principio sobre las piedras con cuidado de no mojarnos y luego directamente sobre el propio río, algo que en esta época del año agradecimos más que lamentamos.
Mientras recorríamos el río, nos fuimos encontrando con numerosas cascadas y saltos de agua, que dotaban al paraje de una belleza extra. Aprovechamos alguno de estos saltos para refrescarnos con un agua que bajaba limpia y cristalina, lejos de toda contaminación.
En algunas zonas había la posibilidad de trepar por la roca para salvar alguno de los saltos de agua, o alguna poza un poco más profunda, nosotros disfrutamos trepando por todas las paredes posibles, equipadas con cuerdas y escalas.
No se cuanto mide este tramo por el cañón, probablemente no llegue al medio kilómetro, pero ese punto de aventura que tiene, hace que pese a que es un tramo muy corto, sea muy intenso ¡Lo disfrutamos al máximo!
Una vez pasadas las rocas, donde el río ha escavado esta espectacular garganta, el paisaje volvió a sorprendernos. Seguimos remontando el río atravesando un frondoso y húmedo bosque que choca con la escasa vegetación de la zona, por un momento parecía que estuviésemos en una selva, rodeados de helechos, musgos, trepadoras, lianas, etc.. más que en los áridos Montes de León.
Y por si el tramo por el cañón no había sido suficiente aventura, al poco de avanzar por este bosque umbrío y a veces misterioso, nos encontramos con la galería romana de Peña Infierna, una galería excavada manualmente en la roca, de 140 metros de longitud, en la que los romanos, unos cuantos siglos atrás, buscaron su metal más preciado: oro. Puesto que íbamos equipados con frontales investigamos gran parte de la galería, pero la incomodidad de ir agachados, junto con el agua que bajaba por su interior hizo que pronto diésemos la vuelta.
Pero esa no iba a ser nuestra única experiencia espeleológica del día, ya que siguiendo el camino, nos encontramos con un desvío que nos llevó hasta las Cuevas del Moro, una cavidad mucho más grande, en la que exceptuando la entrada, pudimos avanzar de pie, pero mucho más corta que la galería anterior, de apenas 10 metros de largo.
Tras visitar las cuevas, regresamos de nuevo al camino, que antes de volver a Montealegre cruza un atractivo despeñadero, desde el que obtuvimos unas bonitas vistas de los angostos valles que rodean al pueblo, marcados por restos de antiguas minas a cielo abierto, que no hace mucho eran el principal motor económico de la zona
Una vez cruzado el despeñadero, bajamos a través de unos pedregales hasta cruzar el arroyo del Mostruelo, que forma esta bonita cascada a unos 60 metros del camino.
Regresamos a Montealegre atravesando un paisaje más acorde con la zona, entre arbustos, encinas y algún que otro castaño, comentando la sorprendente ruta que acabábamos de realizar.
Y por si el tramo por el cañón no había sido suficiente aventura, al poco de avanzar por este bosque umbrío y a veces misterioso, nos encontramos con la galería romana de Peña Infierna, una galería excavada manualmente en la roca, de 140 metros de longitud, en la que los romanos, unos cuantos siglos atrás, buscaron su metal más preciado: oro. Puesto que íbamos equipados con frontales investigamos gran parte de la galería, pero la incomodidad de ir agachados, junto con el agua que bajaba por su interior hizo que pronto diésemos la vuelta.
Pero esa no iba a ser nuestra única experiencia espeleológica del día, ya que siguiendo el camino, nos encontramos con un desvío que nos llevó hasta las Cuevas del Moro, una cavidad mucho más grande, en la que exceptuando la entrada, pudimos avanzar de pie, pero mucho más corta que la galería anterior, de apenas 10 metros de largo.
Tras visitar las cuevas, regresamos de nuevo al camino, que antes de volver a Montealegre cruza un atractivo despeñadero, desde el que obtuvimos unas bonitas vistas de los angostos valles que rodean al pueblo, marcados por restos de antiguas minas a cielo abierto, que no hace mucho eran el principal motor económico de la zona
Una vez cruzado el despeñadero, bajamos a través de unos pedregales hasta cruzar el arroyo del Mostruelo, que forma esta bonita cascada a unos 60 metros del camino.
Regresamos a Montealegre atravesando un paisaje más acorde con la zona, entre arbustos, encinas y algún que otro castaño, comentando la sorprendente ruta que acabábamos de realizar.
Este es el track de la ruta: Cañones del Górgora (10 km).
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Como extra copio tal cual se explica en uno de los carteles la leyenda de las Górgoras:
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Como extra copio tal cual se explica en uno de los carteles la leyenda de las Górgoras:
"Las górgoras son tres monstruos llamados: Medusa, que es tan fea que aterroriza y convierte en piedra a todo aquel que se atreve a mirarla; Uriale, que domina el fuego y Esteno, que controla el agua. Al principio de los tiempos vivían en Persia pero fueron castigadas por la diosa Atenea y desterradas a Peñainfierna. Allí el héroe Perseo con la hoz de diamante que le dio esta diosa le corto la cabeza a Medusa, la metió en un saco y la arrojó al Pozo de la Górgora.
En el desfiladero desembocan dos arroyos, el de Uriale que discurre por el valle ahora llamado de Vidriales, donde está la Raja del Infierno (una grieta que llega hasta el centro de la Tierra) y el de Esteno que lo hace por lo que hoy se conoce como Río Estrecho, donde se encuentra la Vulva de la Górgora. De las entrañas del Buey Mayor, brota un torrente de agua increíblemente blanca, que se precipita garganta abajo para caer en esta y fecundar el bestial ínero de la Furia que engendrará hidras, vivoras, quimeras, dragones... (Poseidón, dios de las aguas, tuvo relaciones con Medusa, y de ellas nacieron monstruos).
Ambos riachuelos se juntan, formando el Arroyo de la Górgora bajo el puente de Perseo, ahora llamado del Paso, sobre el que está el héroe preparado con su hoz de diamante para cortarles la cabeza según van naciendo a todos esos monstruos. Luego las mete en un saco y las arroja al Pozo de la Górgora, donde se convierten en piedras. Si alguno de estos engendros se le escapa, saldrá por el valle de Mostruelo para provocar terribles catástrofes hasta que Perseo logre cortarle la cabeza. Perseo se alimenta de avellanas y bayas rojas de acebo. Habréis de saber que fue él, el que trajo estos árboles de Persia. Las avellanas le dan la vida y los acebines la fuerza."
Grandisima descripción, mañana voy yo
ResponderEliminarMi blog es http://leonesmas.blogspot.com.es/
Me hago seguidor tuyo para seguirte!!!
Quien sabe algún dia nos vemos por el monte
Saludos
Jose
Muy pendiente tengo esta ruta, demasiado pendiente.
ResponderEliminarPara Abril, apuntada queda.
la hice ste verano y me gusto mucho
ResponderEliminarla hice ste verano y me gusto mucho
ResponderEliminarSería posible realizar la ruta con perros o no podrían subir?
ResponderEliminarSe que para algunos pasos hay escapatorias... pero no te se decir si para todos! Yo no la haría con perros!
EliminarNo es sitio para perros. Hay muchos sitios por donde no podrán pasar.
EliminarYo la hice ayer, y es dificil, muy guapa pero dificil y con perros, salvo que estes dispuestoa hechartelos a la espalda y cargar con ellos, no lo veo factible
ResponderEliminarHay zonas para rapelar?
ResponderEliminarNo es necesario rapelar en ningún momento! :)
EliminarTengo 3 niños de 6,9 y 11 años,es factible para ellos?
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